"El Testigo Silencioso" es una escultura que representa la presencia que observa sin intervenir, una figura que guarda historias y emociones desde el silencio. El ojo central en ágata parece capturar todo a su alrededor, como un vigilante sereno y eterno. Las piedras púrpuras que lo rodean evocan emociones profundas, sabiduría y misterio. La obra sugiere la idea de que siempre hay algo —o alguien— que ve, siente y recuerda, incluso cuando no lo notamos.
El Testigo Silencioso
- 20 x 38 cm
- cuarzo
- madera























