Un felino espectral, dibujado con líneas luminosas sobre la oscuridad, parece observar desde las sombras. Tres ágatas con centros abiertos y bordes delicados se disponen alrededor del gato, recordando la suave luz de la luna o ventanas a otro reino. La pintura crea una atmósfera de misterio y tranquilidad, donde la presencia animal se une a la belleza mineral.
Gato de Medianoche
- 30 x 40 cm
- pintura acrílica
- cuarzo