Un estallido de color irrumpe en el lienzo, anunciando la llegada de la primavera. En el corazón de esta explosión, una ágata rosa, semejante a un sol naciente, irradia una cálida luminosidad. Los remolinos de verde y amarillo que la envuelven son como brisas primaverales que acarician la piel. Cada pincelada es una flor que florece, cada gota de pintura, un rayo de sol que danza en el cielo. La obra invita al espectador a sumergirse en un jardín secreto, donde la naturaleza despierta con fuerza y vigor. Es un canto a la vida, una celebración de la belleza efímera y la alegría de los nuevos comienzos.
Explosión de Primavera
- 40 x 50 cm
- pintura acrílica
- cuarzo























